Resulta muy acertada la sentencia de Van Doren cuando afirma que el arte de enseñar es el arte de descubrir. Los docentes tenemos la obligación pedagógica de buscar las mejores maneras de transmitir los conocimientos, actitudes y valores de nuestro proyecto educativo, pero sin lugar a dudas nos tenemos que adaptar al alumnado del nuevo milenio. Ahora bien, no se trata simplemente de ofrecer por ofrecer nuevas maneras de hacer que sean alternativas: definitivamente no debemos ofrecer humo a los alumnos ya que ellos mismos, muy a menudo, han aprendido muchas cosas fuera de la escuela que a veces comprometen el cotidiano del aula.
La gamificación en el aprendizaje
Sergi Sanmartí