Son servicios dirigidos a gestionar las relaciones de convivencia e intervenir en los conflictos en el espacio público. A diferencia de los servicios de mediación, son servicios proactivos, en el sentido de que una de sus tareas principales es la detección de los conflictos latentes en el espacio público y la anticipación a través de dinámicas comunitarias de situaciones que pueden generar conflictos.
Los servicios de intervención en el espacio público tienen como objetivo el conocimiento de los conflictos que emergen en el territorio donde actúan, con la finalidad de anticiparse a los conflictos a través de la proactividad en sus intervenciones siguiendo criterios de prevención del conflicto. Así pues, parte de su tarea es evitar la escalada del conflicto a través de estrategias individuales, grupales y comunitarias construyendo dinámicas de convivencia entre los ciudadanos.