COMPROMISO EDUCATIVO Y SOCIAL

En medio de un tiempo que suele ser muy atareado, este año la Fundación nos adentramos en el espíritu navideño, a través de diferentes momentos y actividades.

Adentrarnos, porque no queríamos quedarnos en la superficie de un momento del año, que tiene una magia especial, un tiempo realmente entrañable.

El tiempo de Adviento, tiempo antes de Navidad, de preparación por la venida de Jesús, se multiplican las actividades a las agendas: cenas, encuentros con los amigos y la familia, visita a los mercados navideños, compra de regalos... todo al nuestro cercando cambia, las calles están plenos de luces y colores, decoraciones que hacen mucho gozo... nuestras casas, yo diría que es el único momento al año, que nos animan a decorar las casas, ... y nos preguntamos: porque todo esto?

A las sesiones que tuvimos de Adviento, nos introduciremos, a través de dos sesiones, dentro de los diferentes símbolos y tradiciones que están presente durante el Adviento y la Navidad, para descubrir que este tiempo, no es una cosa que pasó hace mucho de años, sino que tiene que ver en nuestra vida. No se trata simplemente de preparar el exterior, sino que hay que preparar el interior. Y esta preparación no era hacer más cosas, sino hacerlas desde dentro, desde el corazón. La compra de regalos como símbolo del gran regalo es la otra persona en nuestra vida, la decoración de las casas como una oportunidad para agradecer todo el que tenemos...

La Celebración de Navidad fue una oportunidad para pararnos y recordar todo el amor, que hemos recibido durante el año, de volver a ilusionarnos con el proyecto que Dios nos pone en las manos, y para soñar en una vida mejor por las personas que atiende la Fundación y en la vida de cada uno. Un momento donde nos sentimos familia, y juntos recordamos a los que han sido parte de nuestro día a día y que ahora disfrutan la vida por siempre jamás.

Finalmente, hicimos una Salida a los Pesebres de Castellar del Vallès, donde vivimos otra dimensión de Navidad, Dios se queda con nosotros. Ver pesebres ubicados en diferentes partes del mundo, nos recuerda la prometida de Jesús: "Yo soy con vosotros día detrás día hasta el fin del mundo" (Mateo 28, 20). El pesebre ubicado en la parada de metro de Plaza Cataluña, donde el ángel anuncia la buena nueva, reforzaba de forma especial esta experiencia. Un anuncio de una Buena Nueva, en un tiempo con muchas tensiones, en un lugar donde los senegaleses se refugian para salvaguardar sus artículos, en un lugar donde sólo hace unos meses fue un lugar de terror y de mucha solidaridad por las víctimas de las Ramblas... en todo esto una buena nueva es anunciada, y descubriremos un Dios que viene no de paso, sino para quedarse.

Tuvimos una cata de Navidad, y esto ayudará a vivir y disfrutar estos días de forma más consciente.