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Este año, celebremos Halloween

Este año, celebremos Halloween

Maria Elias Navarro
Responsable académica del área de Animación Sociocultural y formadora de cursos de tiempo libre y gestión cultural
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30.10.18

Justo cuando tenemos la Castañada aquí, a pocos de nosotros nos habrán podido pasar desapercibidas las decoraciones de calabazas, esqueletos, brujas, escobas, telarañas y monstruos varios que han ido apareciendo en los escaparates de nuestras calles durante las semanas previas. Y es que ya hace años que parece bastante evidente que la tradición de Halloween ha venido para quedarse en casa.

Sin embargo, parece que todavía hay ciertas reticencias a que nuestros niños y jóvenes se hagan suya esta tradición en contraposición a la de la Castañada que sentimos más nuestra.

Pues aquí van algunos motivos en defensa de la celebración de la festividad de Halloween:

- Todas las tradiciones comienzan un día y crecen, evolucionan, se modifican y se adaptan a los nuevos contextos con el paso de los años. Son las personas las que dan sentido a las tradiciones, las que se las hacen suyas, las viven y las hacen perdurar. Y en un mundo globalizado como el actual, donde tenemos al alcance de un clic información de cualquier punto del planeta, resulta muy lógico que se dé esta mezcla y enriquecimiento entre culturas. Porque hay que vivirlo como un enriquecimiento y no como una pérdida.

- Las dos tradiciones, Halloween y la Castañada, tienen un origen común de venerar a los muertos y los seres queridos que ya no están con nosotros. Una mezcla de religiosidad, celebración pagana del otoño y del tiempo de cosecha en torno al día de Todos los Santos y el día de Difuntos.

- No es incompatible celebrar la Castañada y celebrar Halloween. ¿Por qué no podemos comer castañas y panellets disfrazados y disfrazadas de brujas o monstruos? Es el momento de ser creativos e innovar en los disfraces de castañera y pasteleros.

- Si queremos decorar nuestra casa, la clase o el esplai, ¿no nos quedará más lucido si llenamos los rincones de telarañas, cruces, esqueletos o velas? Hay que reconocer que la fiesta de Halloween tiene un componente estético espectacular y sin mucho esfuerzo ni dinero se pueden conseguir resultados muy vistosos. Si además contamos con los niños y jóvenes para crear esta decoración le daremos un componente educativo y de estímulo a la creatividad muy interesante, ya que hay multitud de propuestas plásticas que se pueden desarrollar en torno a esta celebración.

- La fiesta de Halloween es divertida y aglutina muchos de los elementos favoritos de los niños, adolescentes y jóvenes tales como el misterio, la fiesta en la calle, los disfraces, un poco de miedo (pero no demasiado) y los dulces. Y pocas cosas pueden competir con este cóctel explosivo de emociones.

El Año Nuevo chino con sus larguísimos Dragones y sus pasacalles, los festivales Holi con sus pigmentos de colores y su música, el Día de Muertos de México y de buena parte de Latinoamérica, el día de San Patricio y sus reuniones con amigos en torno a la cerveza negra y los poetas clásicos irlandeses, el Oktoberfest alemán y tantas otras tradiciones de las que hace unos años ni siquiera habíamos oído hablar, han ido irrumpiendo en medio de nuestras costumbres y ha sido la gente que las ha ido incorporando de manera natural y paulatina en nuestro calendario festivo. Como debe ser.