COMPROMISO EDUCATIVO Y SOCIAL

Conflictos recurrentes en todos los pueblos y ciudades son aquellos generados por la diversidad de usos en los espacios públicos. A menudo las prácticas y lo que se desarrolla transcurre con armonía y buena convivencia, pero a veces genera incomodidades y dificultades para conciliar los distintos intereses sobre el espacio físico. El juego a pelota es, a menudo, uno de los principales conflictos que se genera entre aquellos niños y jóvenes que quieren jugar y chutar la pelota con los amigos/as y compañeros/as en las plazas, hacia aquellos otros que prefieren otro uso como, sencillamente, estar, pasear y otros que implican no ser interferido por los disparos. En este sentido, servicios dedicados a la gestión alternativa de conflictos buscan promover opciones y alternativas dirigidas a la conciliación de las diferentes prácticas a fin de que todos los grupos y colectivos puedan sentirse a gusto en un mismo espacio.

Desde el Servicio de Prevención y Convivencia del Distrito de Sant Andreu se impulsó el proyecto "jugamos corresponsablemente", dirigido a promover otras modalidades de juego no excluyente. La iniciativa está relacionada con promover un juego respetuoso en el espacio público, como la utilización de balones blandos, juegos de manualidades para niños, cuerdas de saltar y palas de raquetas de playa, entre otros; promoviendo un ambiente acogedor, inclusivo y consciente de las necesidades de todas las personas. El proyecto se ha llevado a cabo en la plaza de la Trinitat Vella y en la plaza de Can Fabra de Sant Andreu como resultado de demandas provocadas por las molestias causadas por el disparo de pelotas duras: golpes en el mobiliario urbano, en equipamientos públicos y en personas grandes, así como rivalidades de los propios jugadores y jugadoras. A raíz de la presencia del servicio de prevención por la convivencia en las plazas se sigue fomentando la dinamización de estas prácticas, originando un espacio de dinámicas más inclusivas y cooperativas que fomenten la implicación de actores del territorio.

Al mismo tiempo, el servicio de mediación de Sant Feliu de Llobregat, conocedor de las dificultades de convivencia por el uso de pelota dura en diferentes plazas de la ciudad, se realizó una prospección de los usos de los espacios públicos, poniendo en marcha una prueba piloto de intercambio de pelotas blandas que consistía en ofrecer a los niños/as y jóvenes que juegan con pelotas duras la posibilidad de intercambiarlas durante un rato por otras blandas, con la colaboración de los comercios locales y el Servicio de Gestión de Conflictos de Barcelona. El objetivo que se perseguía era buscar el equilibrio entre los intereses de varios usuarios de estas plazas.

Asimismo, el servicio de mediación ciudadana de Sant Feliu de Llobregat también detectó conflictos vinculados con el juego de pelota en varias plazas de la ciudad, por lo que se sistematizó la recogida de datos de lo que sucedía en los diversos espacios, realizando prospecciones e impulsando una prueba piloto de intercambio de balones blandos, de tal modo que se pudieran compaginar los intereses de los niños y jóvenes que jugaban a pelota con el resto de personas que utilizaban el espacio.

Además, el servicio de mediación ciudadana colaboró ​​en el diseño y puesta en marcha de un Scape City que englobaba pruebas de ingenio, habilidad y cultura esparcidas por la ciudad, y pruebas digitales con una aplicación móvil, para que los usuarios de algunas plazas conocieran otros lugares cercanos donde pudieran jugar tranquilamente a pelota y llevar a cabo otras actividades (parques, plazas, casal para jóvenes, etc.) y así tener alternativas de espacio donde poder realizar la actividad que querían llevar a cabo.

Marta Redondo Pascual, técnica del SPC de Sant Andreu

Álvaro Fernandez Pereira, técnico del SPC de Sant Andreu

Raül Villar Boronat, mediador del Servicio de Mediación de Sant Feliu

Ariadna Martínez Domenech, mediadora del Servicio de Mediación de Sant Feliu

Judith Hernández Juárez, coordinadora de los Servicios de Convivencia de la Fundación Pere Tarrés