EDUCACIÓN SOCIAL Y TRABAJO SOCIAL

[Este texto es la transcripción de la lección final que hizo el profesor Oscar Martínez en el acto de graduación celebrado el día 2 de junio de 2022]

Y un día la vida os regala graduaros de unos estudios universitarios.

Todos habéis tenido que hacer mucho esfuerzo. Dejar de lado muchos días a amigos, familia y parejas porque teníais que entregar un trabajo, preparar una exposición o hacer un examen final.

Y dentro de poco tiempo tendréis el regalo, por ejemplo, de ser supervisores de prácticas de nuestros estudiantes. Os puede parecer lejano, pero ya veréis lo rápido que va la vida a partir de ahora. Y a la velocidad que sea estamos seguros de que cada uno de vosotros asumirá los retos profesionales que soñáis, que tenéis en la cabeza y quizá, ya os aviso, quizá, dentro de 22 años tenéis el privilegio de estar aquí en este escenario haciendo la última clase a una promoción. Si me ha pasado a mí os puede pasar a vosotros.

Gracias por este privilegio.

A partir de ahora tenéis una responsabilidad muy grande. Desde la Facultad hemos procurado acompañaros en un proceso de formación intenso y esperamos que satisfactorio con momentos para aprender, pero sobre todo para crecer como personas.

Mirad, no sé si os habéis dado cuenta o no, (y estoy seguro de que vuestras familias sí que lo han hecho) ... los que hemos estado con vosotros estos cuatro años hemos visto una realidad muy importante: os hemos visto crecer.

Si os oyerais aquellas primeras clases del año 18 donde no sabíais bien que era esto de la educación social y el trabajo social, en comparación con las discusiones que hemos tenido estos días cerrando los TFGs descubriríais que sois muy capaces de ello, de haber aprendido, pero sobre todo de haber crecido.

Sobre los aspectos que habéis aprendido y seguro deberéis tener presentes en su vida profesional déjenme que le diga unos cuantos concretos. Estoy convencido de que por su trabajo.

Necesitareis la ética de Jesús Vilar

De la gestión de crisis del Àngels Sogas

De las habilidades sociales de Lisette

De las técnicas de entrevista de la Gisela

De la salud mental de Elena Requena

De la dimensión comunitaria del Miqui Pulido

Del impacto del ocio de la Txus

De las habilidades también de Paco

De la antropología de Enric y Rat Garcia

De las artes escénicas de Pere Joan

De la psicología de Isabel Torras

De la interseccionalidad de Marta Ausona

De la evaluación de Maite Marzo

De la gestión de entidades del Pere Mora

De la política Social de Jordi Sabater y Roger Buch

.... y de todo lo que nos aportan un equipo de profesorado de casi 150 personas que obviamente no hubiéramos podido realizar nuestro trabajo si no fuera por el personal de limpieza, de secretaría, conserjería, servicio de orientación, internacional y atención a los alumnos.

Gracias también a todos ellos.

El mundo necesita de personas como vosotras, necesita de personas que transformen los días grises de las personas en días con cielo azul y sol luminoso.

El mundo sobre todo necesita personas, como vosotros, que hayan crecido para saber ver, pero sobre todo mirar donde hay que mirar. Y es que bajo la alfombra del Estado del Bienestar hay muchas cosas que mirar y contar.

Y es que el sistema está montado de una manera para que no miremos ni denunciemos sus debilidades y no me gustaría dejar de recordaros algunas de estas sobre las que tendréis mucho trabajo por hacer:

Las mil personas que esta noche dormirán en las calles de Barcelona son el último eslabón del capitalismo salvaje que ha convertido el derecho a tener una vivienda en un negocio. Pero también están ahí fruto de la desatención generalizada en todo el territorio. Y quizá algún día, depende de qué municipio de Cataluña trabajéis os harán gestionar la pobreza extrema con una tarjeta de tren como solución para que los datos de sinhogarismo bajen en ese lugar.

Os tocará lidiar con el derecho a los servicios básicos para vivir. Y esto significará toparse con el negocio de la electricidad para tener luz, con el negocio del gas para que los niños y niñas o personas mayores puedan vivir con una temperatura confortable y evitar enfermedades, o con el negocio del agua que también tenemos tan normalizado en nuestro país.

Pero si esto no es suficiente, también os tocará ver de cerca el impacto del acceso precario a la salud pública. Algunas organizaciones incluso deben generar equipos humanos para realizar acompañamientos médicos a personas que no tienen recursos suficientes como para poder hacerse cargo de su propia salud. Tres o cuatro minutos de visita médica no son suficientes para mucha gente. Y es que no descubro nada si os digo que la salud pública en nuestro país tiene muchas limitaciones. Y las limitaciones, como siempre, recaen especialmente en los más débiles, aquellos que no saben cómo reclamar que les atiendan como Dios manda o les deriven a hacer una rehabilitación al sistema público. Mucha gente no llega a los servicios porque carecen de recursos para reclamarlos.

El querido Carles Ariza en sus libros nos explica las diferencias de esperanza de vida que hay sólo cambiando de barrio en la ciudad de Barcelona. Y se espera de vosotras que podáis incidir en estos aspectos y como mínimo acompañar a las personas para que este impacto sea menor.

Por otra parte, en estos últimos meses he descubierto a las miles de personas que hay en Cataluña con enfermedades crónicas que las invalidan para continuar trabajando, pero el sistema, lejos de protegerlas, les obliga a hacer un sobre esfuerzo inhumano del todo inaceptable condenándolas a una pseudo-vida muy precaria, a pesar de que sus médicos certifican que no pueden trabajar. En los servicios donde estaréis tendréis que detectar muchos sufrimientos como estos, que impactan en muchas familias y que quizá se nos han escapado de explicaros durante la carrera.

Y cuando hablo de salud, no puedo dejar de advertiros que trabajar de educadora, de trabajadora social o de cualquiera de las especialidades de masters y posgrados que estáis presentes, significa estar muy atentas a la salud mental. De nuevo, el sistema en el que vivimos genera un sufrimiento mental en las personas que hace que el suicidio sea la primera causa de muerte no natural en España (tenéis los datos en el INE). Su trabajo también significa estar atentos a lo que les ocurre a las personas y tratar de establecer estrategias para reducir este sufrimiento mental.

Por supuesto, obviamente, también os ruego que os cuidéis mucho y que intentéis estar en forma mentalmente.

Y no contentos con esto... También sois las herederas de un planeta que os dejamos exprimido de recursos y en muy mal estado y con un cambio climático que es tan importante reducirlo como que supone, entre otros, oleadas migratorias que se transforman en vidas precarias y familias rotas… y un cambio climático que también genera dificultades para el acceso a los alimentos en muchos países del sur.

Herederos también de un planeta, además, machista donde las diversidades no son bien recibidas.

Y sólo un apunte más de aspectos que tendréis presentes y que creo que es importante que os marque hoy: La extrema derecha. No tengo la solución o en todo caso no puedo extenderme, pero éste es un grave peligro para el trabajo que hacemos y las personas a las que atendemos. Que nunca tengan representación los del nombre de color verde en nuestro país, por favor. Haced lo que sea para que nunca tengan representación o sufriremos como profesionales.

Todo esto son aspectos que tienen un efecto que también os encontrareis diariamente en el trabajo.

Como sabéis, el mundo es imperfecto. Y sobre todo es imperfecto para unos pocos.

Porque, aunque la actitud es muy importante, hay personas que la vida les ha puesto muchas piedras en el camino. No es cierto que todo el mundo tiene las mismas oportunidades y no es cierto que para todos querer es poder. Porque muchos y muchas comienzan la carrera de la vida cien metros atrás y con el triple de obstáculos.

Pero mirad, también habéis escogido las mejores profesiones que hay en el mundo. Os lo digo sinceramente. No hay día que no me acuerde de mis 20 años de profesional. Ya veréis cuando consigáis momentos de éxito, pequeños, pero de éxito. FLIPARÉIS. Os aseguro que con la profesión que habéis elegido se os pondrá la piel de gallina muchas veces.

Descubriréis que para mucha gente en muchos momentos [y lo dice Kuppers muchas veces] la vida es una mierda. Pero tendréis la oportunidad de hacer ver a las personas que, a pesar de lo que parezca, no están en un pozo, que están sólo en un túnel. Y del pozo no te sale, pero del túnel sí [y eso también lo dice Kuppers].

Cuando veáis que la gente se supera, FLIPAREIS.

Cuando os encontréis una persona a la que habéis atendido y está bien FLIPARÉIS.

Cuando os den las gracias FLIPARÉIS.

Cuando veáis que alguien consigue sus metas vitales FLIPARÉIS.

No os oculto que tendréis días que querréis dejar la profesión. Antes de hacerlo, tenéis nuestros mails. Enviadnos un correo y hablemos antes de tomar una decisión.

Pero prevalece por encima de todo que estos son oficios que merecen mucho la pena.

Estamos muy contentos de que hayáis llegado hasta aquí y hoy os graduéis, de verdad, la enhorabuena, estamos muy felices de veros tan alegres.

Voy terminando.

Os decía que no os extrañe que en un tiempo os encarguen acompañar a alguno de nuestros estudiantes como supervisores de prácticas. Como os decía, a pesar de que os quede lejos, también les quedaba muy lejos todo esto a muchos exalumnos nuestros y después:

- Núria montó uno de los primeros centros de día en Barcelona

- David y Joan publicaron libros maravillosos sobre su práctica profesional

- O Silvia se gana la vida con un proyecto contratado por muchos hospitales de Cataluña después de haberlo presentado como Trabajo Final de Grado.

A partir de hoy pasáis a ser compañeras y compañeros de profesión. Y en este sentido, si hay algo con lo que querría que os quedarais por el paso de la facultad, o al menos desde mi punto de vista, sería que mirarais a los ojos a las personas a las que atenderéis. Cuando digo mirar a los ojos quiero decir desde la misma altura. Mirada horizontal (que le dice David Vázquez en su libro).

Y es que hay un vínculo totalmente estrecho entre las personas a las que atenderéis y vosotros, cada uno con una función en la vida, pero el vínculo ineludible de ser personas.

Esto me recuerda que alguna vez he hecho la broma en clase de que quería que salierais bien formadas de la facultad para que cuando sea mayor y esté en una residencia esté bien atendido por alguna de vosotras. Pues bien, una de las experiencias más emotivas que he tenido estos últimos años ha sido justamente encontrarme una estudiante de prácticas en el Hospital Guttmann en una sala muy grande donde yo estaba esta vez como usuario.

Lejos de sentir pudor, porque cuando estás en el Hospital Guttmann es probable que no estés en tu mejor versión... Lejos de sentir pudor, sentí mucho orgullo de haber tenido a aquella estudiante en clase y también pensé que en una situación como esa aquello era estar en las mejores manos posibles.

He dado muchas vueltas a aquella situación que no ha sido menor en mi vida, y os diré una cosa para terminar:

Si alguien debe atenderme en algún momento en la vida que sea alguien de vosotras.

MUCHAS GRACIAS

FELICIDADES