EDUCACIÓN SOCIAL Y TRABAJO SOCIAL

¿No has tenido nunca la sensación de estar desorientado? ¿De que hagas lo que hagas todo sale mal? ¿Que parece que todo se te ha vuelto en contra? ¿Sí? Pues debes saber que esto le pasa a mucha gente y que para poder controlar de nuevo esta situación, todo pasa porque tú cambies y cambiando tú, todo cambiará.

Muchas veces somos conscientes de lo que sentimos, pero no de que eso que sentimos nos proporciona un pensamiento. Por lo tanto, tenemos que conseguir controlar lo que pensamos para conseguir cambiar nuestras actitudes. Si tú consigues cambiar lo que piensas cambiarás tú y poco a poco verás cómo tu entorno también va cambiando.

Mira te pondré un ejemplo. Un día cualquiera en tu ciudad, hace sol, te levantas temprano, tienes que hacer algo muy importante. Te has levantado con el tiempo suficiente. Sales de casa contento y al salir te das cuenta que hay un tráfico muy intenso.

La primera opción es que empieces a pensar que te invade la catástrofe, que todo te pasa siempre a ti, que todo es culpa de los demás, que no vas a salir, que llegarás tarde, te empiezas a poner nervioso y empiezas a interpretar la realidad a partir del filtro de tus pensamientos. Empiezas a llamar, empiezas a decir palabras malsonantes y entonces, poco a poco, este patrón de pensamiento es lo que rodeará tu conducta. ¿Eso qué hará? Que si además tú estás conduciendo pongas en riesgo tu seguridad y la seguridad de los demás. Y lo que es peor, cuando llegues a tu lugar de destino descargarás toda esta ira sobre alguien que no tiene nada que ver y eso te hará sentir muy mal.

La otra opción es que tú salgas de casa pensando que las cosas no van contigo, que no hay nada personal, que mira, todos habéis decidido salir de casa a la misma hora, por tanto, lo que te está invadiendo es un sentimiento de serenidad. Y bajo este patrón empezarás a actuar. Te sentirás bien, dirás no puedo hacer nada para mejorar el tráfico que dependa de mí y por tanto decides, bajo este patrón de pensamiento, elegir una emisora ​​de radio, escuchar música y relajarte. Eso te hará sentir muy bien.

La diferencia entre una opción y la otra será muy grande. La diferencia ha estado en el mensaje del pensamiento que enviamos a nuestro cerebro. Por lo tanto, como siempre hemos estado diciendo, si tú eres capaz de conseguir controlar lo que piensas, serás capaz de controlar la situación y por lo tanto serás capaz de cambiar.

Pero no te preocupes, porque todo esto se aprende. Hay unas técnicas que te llevan a hacer todo un autoconocimiento. Cuanto más te conoces a ti mismo más sabes lo que piensas y por tanto más controlas como actúas. Tener presente esta relación del pensar, sentir, actuar te hará tener una mirada más positiva del mundo, porque pensarás que todo depende de ti para conseguir el cambio. Verás que si, poco a poco, tú cambias, tu entorno cambiará y todo irá a mejor.

Esto también te ayudará en el mundo profesional, cuando inicias una relación de ayuda tienes que entender que el proceso lo hace el otro y que el ritmo lo marcará el otro, tú estás al lado para ayudar, pero nunca juzgar. Y como decía Espinosa "la razón nos hace a todos iguales, pero son los sentimientos lo que nos hacen diferentes". Por lo tanto, lo que nosotros podemos afirmar es que vemos la vida bajo el filtro de nuestros pensamientos.