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12.09.16

Hoy han empezado la mayoría de las 38 escuelas infantiles de la Fundación Pere Tarrés donde se atienden a unos 3.020 niños de 0 a 3 años. El compromiso educativo de la Fundación comienza en la pequeña infancia, ya que a pesar de que el primer ciclo de educación infantil no tiene carácter obligatorio, la Fundación está convencida de que la escolarización de los niños tiene una función educativa clave en sus primeros años de vida.

Durante la etapa en la que un niño asiste a la escuela infantil, los 0 a los 3 años, su cerebro abarca aproximadamente los dos tercios de su tamaño definitivo y evoluciona a un ritmo mucho más acelerado de lo que lo hará posteriormente. Por esta razón, en este periodo el aprendizaje emocional de los niños es clave y su impacto es muy profundo. Siguiendo esta línea pedagógica, la Fundación Pere Tarrés concibe el espacio de la escuela infantil como un espacio que dé seguridad y confianza a los niños, un lugar en el que puedan desarrollar sus capacidades sensoriales, motrices y emocionales.

La Fundación Pere Tarrés reúne un total de 38 escuelas infantiles que atienden a 3.020 niños, 18 de titularidad municipal con una gestión integral por parte de la Fundación y 19 a las que da soporte, todas con un denominador común: el proyecto educativo del centro.

Conscientes de que el inicio de la escuela infantil supone la entrada en un nuevo lugar desconocido para el niño y las familias, desde la Fundación Pere Tarrés hemos preparado algunos consejos para una buena adaptación.

Todo a punto para los comedores escolares y las actividades extraescolares

Y en el mes de octubre también comienzan los comedores escolares y las actividades extraescolares donde la Fundación atiende a más de 23.000 niños. El rato del mediodía incluye la comida, con sus connotaciones de satisfacción de necesidades fisiológicas, y un período de tiempo libre, que se convierte en un espacio educativo muy adecuado. Con el apoyo del equipo de monitores y monitoras, este espacio crea momentos de gran importancia educativa, donde los niños aprenden hábitos de alimentación saludable y de comportamiento en la mesa y también se desarrollan acciones educativas planificadas que les ayudan a crecer en valores.