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La Fundación Pere Tarrés edita una guía de buenas prácticas educativas para el espacio de comedor escolar

La Fundación Pere Tarrés edita una guía de buenas prácticas educativas para el espacio de comedor escolar

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17.10.24

Reflexionar sobre la vertiente pedagógica del espacio de ocio educativo que se genera en el comedor escolar, ofrecer herramientas y conocimiento práctico sobre el trabajo que se realiza y proponer buenas prácticas a los equipos educativos. Estos son los principales objetivos de “Comedores escolares. Espacios educativos de calidad”, un nuevo libro editado por la Fundación Pere Tarrés y Editorial Claret que se presentó ayer y que quiere ser un manual de referencia para los profesionales del sector del ocio educativo que desarrollan su labor en el espacio de mediodía escolar, tanto el equipo educativo como las personas encargadas de la coordinación y dirección.

Esta nueva publicación nace de la constatación de que, a pesar de la creciente importancia que en los últimos años están adquiriendo los programas de educación en el tiempo libre fuera del aula como espacios pedagógicos de primer orden, existen pocas publicaciones que reflexionen a fondo sobre el trabajo que se desarrolla y sobre los profesionales que la llevan a cabo. Por eso, el libro quiere "aportar una mirada global al potencial y al funcionamiento de este servicio educativo", según afirma el director adjunto de la Fundación Pere Tarrés, Rafael Ruiz de Gauna, en la introducción.

La publicación se divide en cuatro bloques, que abordan los grandes temas a tener en cuenta, siempre con un enfoque que destaca la vertiente educativa de estos espacios, integrada en el funcionamiento de la escuela pero desde dinámicas y relaciones diferentes a las que se producen dentro del aula o con el equipo docente. El primero sitúa en qué marco y contexto se da la actividad y cómo debe vincularse con el proyecto del centro escolar. El segundo aborda más directamente la gestión y el modelo, con las diversas implicaciones que pueden encontrarse: laborales, legales, económicas o del equipo de monitores, así como el papel de los propios niños y niñas. Como no podía ser de otra forma, la obra también plantea la dimensión nutricional y de salud que comporta el comedor escolar, un espacio esencial para la adquisición de hábitos alimentarios saludables. Y en el último capítulo ofrece propuestas de buenas prácticas que pueden inspirar experiencias y contribuir al desarrollo de hábitos y valores, y cuestiones más pragmáticas como orientaciones para actuar en caso de accidente. La publicación concluye con un epílogo autoevaluativo que resume en diez claves cuáles son los aspectos a tener en cuenta para desarrollar un buen servicio de comedor en la escuela.

“Los momentos del mediodía en la escuela son relevantes para los niños. Aparte de cubrir las necesidades alimentarias de forma saludable, que en ocasiones no encuentran equivalente en casa, por economías precarias o estrés laboral, se complementan con actividades o espacios creativos que les permiten ser ellos mismos y desarrollar habilidades y relaciones que, a menudo, no encuentran en ningún otro entorno. Además, ayudan a los educadores y educadoras a incidir sobre determinados aspectos del bienestar físico y emocional de los niños”, reflexionó ayer Ruiz de Gauna durante la presentación del libro. En el mismo acto, el catedrático de Sociología de la Educación y profesor de Sociología de la Educación de la UVIC Jordi Collet reclamó la universalización de las actividades de ocio educativo como el espacio del comedor escolar. “Si las políticas de ocio educativo no son universales, se benefician de ellas sólo las clases sociales más favorecidas. Una verdadera equidad comporta que también los niños en situación de mayor vulnerabilidad puedan disfrutar de actividades como los espacios de ocio escolar en el mediodía.”

La publicación combina reflexión y práctica, con el fin de potenciar un espacio que progresivamente se ha convertido en más importante en la vida de los niños y niñas y de las familias. El análisis se realiza desde el conocimiento adquirido por la Fundación Pere Tarrés en la gestión diaria de unos sesenta espacios de comedor escolar por toda Cataluña, por los que pasan anualmente unos 18.000 niños, niñas y jóvenes, y de la formación de monitores y directores de ocio educativo, en la que la Fundación fue pionera y que cada año forma más de 2.000 jóvenes.

Se puede encontrar más información sobre el libro y adquirirlo directamente a través de la web de la Editorial Claret: https://www.claret.cat/llibre/menjadors-escolars-9788491364696/