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Entrevista a Txus Morata, coordinadora del número 73 de la revista de Educación Social. Revista de Intervención Socioeducativa

Entrevista a Txus Morata, coordinadora del número 73 de la revista de Educación Social. Revista de Intervención Socioeducativa

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06.04.20

El monográfico se titula ‘Ocio, acción sociocultural y educación’. En este número se analiza el ocio, la acción sociocultural y la educación desde diversas perspectivas. ¿Cuál es el papel que juegan en la sociedad estos elementos?

Las perspectivas que se han querido recoger en este monográfico debido a su relevancia se concretan en los siguientes puntos

  • El estudio del ocio educativo: una perspectiva internacional i transcultural.
  • El ocio educativo y la acción sociocultural como promotores de cohesión social
  • La importancia del ocio educativo para la gente mayor como elemento de desarrollo humano.
  • El ocio educativo como espacio de promoción y prevención de la vulnerabilidad social y la salud mental positiva en adolescentes y jóvenes.
  • Y, finalmente, la contribución de las entidades del ocio educativo y centros socioeducativos en el desarrollo de competencias académicas y de ocupación de los niños y adolescentes que participan.

Todos estos aspectos son de especial relevancia en el momento actual donde el tiempo libre puede actuar como factor de prevención, reinserción y promoción de la ciudadanía y las comunidades.

En el editorial, se pone en valor la función del ocio y la acción sociocultural en el desarrollo humano. ¿Cómo han evolucionado estos elementos a lo largo del tiempo?

Desde sus inicios, el ocio y la acción sociocultural han sido contextos favorecedores de la promoción de la ciudadanía, convirtiéndose en espacios de prevención, ante sociedades complejas y en riesgo. Así pues, estos contextos educativos no están asociados únicamente a la recreación, sino que tienen un potencial de desarrollo humano que facilita que las personas, las comunidades y las sociedades accedan a grados superiores de humanización.

 

En el primer artículo se hace un análisis a nivel internacional y transcultural del ocio educativo. En este contexto, ¿qué podemos aprender de la experiencia de otros países?

Este artículo evidencia que, a pesar de las limitaciones y orientaciones particulares, el estudio del ocio educativo está presente tanto en el ámbito anglosajón como en el ámbito europeo, contextos donde se ha consolidado como hegemónico en el campo de la investigación y de los programas académicos. A pesar de que en cada contexto social y cultural del ocio educativo presenta características específicas, destacamos algunos elementos compartidos que se han identificado a partir del análisis de la literatura especialitzada. Estos ámbitos de educación y de desarrollo cultural siempre han sido y siguen siendo, primero, espacios de gran valor educativo y social; segundo, espacios que proporcionan aportaciones relevantes relacionadas con el desarrollo personal y social y, en tercer y último lugar, espacios que posibilitan la promoción de la participación ciudadana y la mejora de competencias para la vida profesional y la inclusión social.

 

En cuanto al ocio educativo y la acción sociocultural, se reflexiona sobre su impacto en el territorio. ¿Qué papel juega como elemento cohesionador?

Las entidades y actividades de ocio educativo y de acción sociocultural son especialmente activadoras y constructoras de cohesión social en el marco de los barrios y territorios. Algunos aspectos que creo que pueden describir cómo este tipo de actividades dinamizan la comunidad, se concretan 5 ideas:

  • Las entidades de ocio educativo y de acción sociocultural son espacios donde aprender y practicar la participación social.
  • El ocio educativo y la acción sociocultural promueve (desde siempre, desde sus inicios) el desarrollo de un modelo de ciudadanía con capacidad de movilización y de activismo social.
  • Las entidades de ocio educativo y la acción sociocultural tienen capacidad para promover la convivencia en los barrios y en los territorios, especialmente ante sociedades cargadas de diversidad.
  • Las entidades de ocio educativo y de acción sociocultural contribuyen a la creación de redes de apoyo social y vecinal.
  • La capacidad de estas entidades de promover líderes sociales y convertirse al mismo tiempo, las propias entidades, líderes sociales en los territorios donde actúan.

 

En el cuarto artículo, se pone de relieve la importancia de educar en el ocio y el tiempo libre a los jóvenes en situación de vulnerabilidad. ¿Cómo mejora del ocio socioeducativo el desarrollo personal de estos chicos y chicas? También el ocio permite desarrollar habilidades sociales para la promoción de la salud en positivo.

El ocio educativo, especialmente para los jóvenes en situación de vulnerabilidad, requiere de intervenciones centradas en darles oportunidades para desarrollar un tipo de ocio saludable, que promueva la participación. Algunas de las claves metodológicas importantes para la promover estas actividades de ocio son la creación de relaciones significativas entre los propios jóvenes y entre los jóvenes y los dinamizadores, basadas en la confianza y el respeto; atender sus demandas; innovar en acciones y actividades cercanas a los intereses de los jóvenes y diseñar actividades inclusivas y inclusoras.

También el ocio educativo se convierte en una oportunidad para entrenar y ejercitar habilidades de relación, habilidades comunicativas y habilidades para la resolución de conflictos, especialmente con los adolescentes, un colectivo que se encuentra en la búsqueda de su propia identidad personal y social .

 

De hecho, el ocio y la acción cultural también permiten el desarrollo de las competencias académicas y de empleabilidad.

Ciertamente, se están desarrollando estudios que pretenden poner de relevancia los beneficios que la participación en entidades de ocio educativo y centros socioeducativos posibilitan a los niños y adolescentes que participan en ellos. Concretamente, desde diferentes estudios e investigaciones se constata que las competencias más desarrolladas por los jóvenes que participan en esta tipología de centros son, por un lado, la competencia social y la competencia cívica, con respecto a las competencias académicas y, por el otro, la toma de decisiones, la resolución de problemas y la flexibilidad, en relación a las competencias de empleabilidad.
 
También algunas metodologías que los participantes en los estudios destacan como favorecedoras para el desarrollo de estas competencias son los juegos, las asambleas, el trabajo por proyectos y los grupos colaborativos, entre otros. Todas elles son metodologías activas y con un marcado posicionamiento participativo.

 

Cada vez más la población mayor goza de un ocio que hay que ir desarrollando para ofrecer recursos y actividades desde una perspectiva de desarrollo humano

Ante el emergente colectivo de personas mayores activas que nos encontramos en nuestra sociedad actual, que busca propuestas innovadoras para desarrollarse de forma integral, es necesario aportar propuestas de ocio que den respuesta a la necesidad de este colectivo, contribuyendo a la mejora de su calidad de vida y fomentando su aportación social a los contextos cercanos. Hablamos de colectivos, en muchas ocasiones, con altos niveles de capacitación, que pueden y quieren seguir siendo agentes de transformación social, a la vez que buscan seguir creciendo y desarrollándose como personas.